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Web3 es la tercera generación de servicios de Internet para sitios web y aplicaciones. Este concepto se centra en el uso de la comprensión de datos basada en máquinas para proporcionar una Web semántica y centrada en datos. El objetivo final de Web3 es crear sitios web más inteligentes, más conectados y más abiertos. No sólo eso, sino que el objetivo de Web3, como veremos más adelante, es también devolver el protagonismo a los usuarios.
Web3 aún no está implementado, por lo que aún no hay una definición clara sobre varios aspectos. Para que te hagas una idea, hacer la transición de la web original, de la Web 1.0 a la Web 2.0, llevó más de una década. Hoy en día, todavía estamos trabajando con Web 2.0 y pueden pasar años hasta que veamos todas las capacidades de Web3.
Para darte un poco de historia sobre Internet, podemos ver que cada tema para cada una de las versiones Web:
En la web temprana, llamada 1.0, todo funcionaba en torno a los hipervínculos. Primero apareció la Web 1.0, también conocida como World Wide Web. Algunos de nosotros recordaremos aquellos días en que conectarse a Internet era un proceso lento y aún no había muchas opciones.
A continuación, tenemos Web2.0. Este anduvo por las redes sociales. Este es el término que has estado escuchando en los últimos años con el boom de Facebook, Twitter y otras empresas.
A medida que más personas comenzaron a usar Internet, el potencial que tenía se comprendió a nivel mundial. Por ello, se crearon nuevas infraestructuras para potenciarlo. Internet se volvió más rápido y permitió aplicaciones y sitios web más pesados, lo que dio lugar a la era de las redes sociales y las grandes plataformas como Netflix, YouTube, Facebook o Amazon.
Hoy, personas de todo el mundo pueden compartir información y entretenerse, comprar, encontrar respuestas a sus preguntas e interactuar entre sí gracias a la Web 2.0.
La última generación, Web 3.0, se basa en tokens, las unidades digitales de intercambio de las tecnologías blockchain.
Ya hay algunos ejemplos de Web3. Por un lado, tenemos a Siri de Apple, que utiliza técnicas de reconocimiento de voz e inteligencia artificial para traer resultados y realizar acciones . Para que nos hagamos una idea de la mejora que esto supone, las Webs 1.0 y 2.0 realizan correspondencias palabra a palabra del texto en relación a lo publicado en la red. Esto a menudo trae consigo un sesgo de información.
Los sistemas Web3, sin embargo, buscan conocimiento contextualizado para ayudar a las personas en sus búsquedas, apuntando a una serie de análisis e información potencialmente útil. Una de las distinciones del motor de búsqueda Web 3.0 es el tiempo que el usuario necesita para navegar a través de un universo de datos para encontrar lo que realmente quiere resolver.
Empresas como Amazon, Apple e IBM han estado invirtiendo fuertemente en tecnologías Web 3.0. Por ejemplo, Google Inc. durante la última década ha realizado varias adquisiciones de empresas en el área de la Web Semántica, como Applied Semantics y Metaweb Technologies, Inc, entre otras.
Por otro lado, no todo tardará tanto en llegar a nuestro día a día. Hay algunas tecnologías que definirán esta nueva web que ya se están desarrollando. Por ejemplo, el hogar inteligente y las aplicaciones de automatización del hogar que utilizan redes inalámbricas e IoT son ejemplos de cómo Web3 ya está impactando en la tecnología.
Si nos vamos a los dispositivos existentes: Siri de Apple o Alexa de Amazon son ejemplos de Web3 ya que combinan la inteligencia artificial con el reconocimiento de voz. Esta red aún está en desarrollo y todavía queda un largo camino por recorrer. Otro jugador importante en Web3 es Brave Browser y algunos mecanismos de recompensa interesantes como los tokens BAT.
En primer lugar, la Web 3.0 se centrará principalmente en los datos. Estos datos son infinitos y por ello es necesario diseñar una arquitectura y tecnología de almacenamiento adecuada. Aunque Big Data parece ser el camino a seguir, aún queda investigación por hacer sobre el uso más efectivo de la tecnología para almacenar y administrar estos datos, ya que también podrían surgir problemas de privacidad en el futuro.
Este nuevo modelo web cuenta con muchos servicios basados en la economía de tokens, por lo que la propiedad y control de estos servicios estaría repartida entre los propietarios de los tokens, que también son usuarios. Los tokens, como sabemos, tienen valor de cambio, por lo que los usuarios pueden recolectar estos tokens cuando lo deseen. Por lo tanto, Web3 y DeFi también pueden ir de la mano.
Lo que sí parece es que la Web 3.0 se centrará principalmente en los datos. Estos datos son infinitos y, por lo tanto, es necesario diseñar una arquitectura y tecnología de almacenamiento adecuadas. Aunque Big Data parece ser el camino a seguir, todavía queda mucha investigación por hacer sobre el uso más efectivo de la tecnología para almacenar datos, ya que podrían surgir problemas de privacidad.
Esta red dará a los creadores y usuarios más libertad en general. Garantizará que estos últimos siempre tengan control sobre sus datos en línea mediante el uso de redes descentralizadas. También se espera que la próxima versión de Internet sea más confiable dada su naturaleza descentralizada, lo que elimina la posibilidad de un punto único de falla.
No necesita ser controlado por una sola entidad. Es posible que las empresas más grandes ya no tengan el control total de Internet. Como resultado, las aplicaciones o aplicaciones descentralizadas no se pueden censurar ni restringir de ninguna manera.
Lo que está pasando ahora con la Web 2.0 es que los usuarios crean, pero son las empresas tecnológicas las que monetizan este contenido
También podremos personalizar nuestra experiencia de navegación porque este tipo de sitios web podrán comprender nuestras preferencias y gustos. Esto también nos permitirá navegar de forma más productiva, centrándonos en lo que realmente nos interesa.
Así como Web3 ayudará a los usuarios, esta versión también ayudará a las empresas, y esto hará que el comercio electrónico siga creciendo. Los vendedores comprenderán mejor nuestras necesidades de compra y nos mostrarán aquellos productos y servicios que estamos interesados en comprar con la ayuda de la inteligencia artificial. Esto nos permitirá ver anuncios mejores y más relevantes que tienen más probabilidades de ser beneficiosos para nosotros.
En los últimos años hemos visto casos que por interrupciones en el servicio hemos perdido el acceso a algunos sitios o servicios por horas.
Dado que los datos se almacenarán en bases de datos distribuidas por descentralización, los usuarios no tendrán que preocuparse por interrupciones del servicio o suspensiones de cuentas por razones técnicas.
Como hemos comentado en el punto anterior, una de las características clave de la web 3.0 es la descentralización. En esta nueva versión, los datos se conectarán de forma descentralizada, a diferencia de la 2.0, en la que se almacenan principalmente en lugares centralizados. Por lo tanto, los datos ya no se guardarán en los centros de datos de las grandes corporaciones.
Lo vimos con la explosión de la web 2.0 que trae las redes sociales y la interactividad con el usuario, que crea la mayor parte de su contenido. Es la era de empresas como Facebook, Google, Apple, Amazon, que crean servicios centralizados en silos que dependen de estas corporaciones.
El impacto de la Web 3.0 en las empresas se producirá de diferentes formas. En algunos casos, los hará altamente centrados en el usuario y más transparentes . Todo lo que estaba mal en cuanto a los datos de los usuarios sufrirá una transformación radical.
Tanto las empresas tradicionales como las nuevas darán la bienvenida a la tecnología Blockchain y todas las posibilidades que ofrece. Verás que tus aplicaciones recibirán actualizaciones de blockchain en las que todo se hará público y accesible.
La Web 3.0 traerá consigo un cambio importante en el funcionamiento de Internet al centrarse en la privacidad del usuario. De hecho, este es un problema que se ha discutido durante mucho tiempo pero que no se ha resuelto de manera efectiva.
La Web3 utiliza la tecnología blockchain, a diferencia de la Web 2.0, que aprovecha Internet para desarrollar aplicaciones. Es técnicamente más seguro almacenar los datos de los clientes en una cadena de bloques, ya que está descentralizado y su uso por parte de las empresas es transparente, lo que los protege de los piratas informáticos. Algunos expertos dicen que la transferencia de la propiedad de los datos a los consumidores podría alterar el sector de la tecnología. Y esto se debe a que muchas empresas tecnológicas perderían el acceso a los datos que les han dado una ventaja competitiva hasta ahora.
Además, gracias a la tecnología blockchain, los visitantes de un sitio web tendrán una experiencia de inicio de sesión más agradable. Piensa cuántas veces has iniciado sesión en sitios web usando tu perfil de Facebook. La tecnología Blockchain emplea el mismo principio que Facebook, que ya posee la información del usuario. Sin embargo, al usar Blockchain, usted será el único propietario de su información.
En resumen, en la Web 3, los usuarios también podrán interactuar con los datos gracias al uso de la inteligencia artificial y la tecnología de aprendizaje automático. Es decir, combinará los conceptos de la Web Semántica con la IA.
Por otro lado, el uso de la inteligencia artificial permitirá que los datos lleguen mucho más rápido a los usuarios y que estos datos sean más relevantes y personificados. Estamos comenzando a ver el uso de esta tecnología en Internet a través de algoritmos que se utilizan para sugerir productos o videos a los usuarios en función de sus búsquedas anteriores.
Sin embargo, esto será aún más avanzado, y todavía tenemos que ver una amplia gama de nuevas posibilidades en los próximos años.
Podríamos decir que con Web3 volvemos a donde comenzó Internet y la idea original: una Internet descentralizada, donde no hay control de las autoridades centrales y el poder se devuelve a los usuarios y consumidores. Sin embargo, todavía está por verse todo el potencial de Web3.
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